por La anorexia empieza a manifestarse en la adolescencia (cerca del 73 por ciento de los enfermos tienen entre 11 y 20 años), cada vez hay más evidencia de que niños y adultos la están desarrollando. Además, mientras que antes era un problema casi exclusivo de las mujeres, actualmente cerca del 5 por ciento de quienes la padecen son hombres.
¿Qué es la Anorexia?
La anorexia nerviosa es un trastorno de la alimentación cuya característica es la pérdida deliberada de peso, inducida o mantenida por el mismo enfermo. El término anorexia proviene del griego que significa “falta de apetito”, y es una enfermedad mental derivada de un intenso temor a la obesidad, en la que la persona genera una serie de conductas que tienen como objetivo conseguir el ideal del “cuerpo perfecto”. Éstas personas evitan a toda costa comer alimentos que engordan y pueden desarrollar conductas como vómitos autoinducidos, purgas intestinales, exceso de ejercicio y consumo de fármacos para adelgazar y que quiten el hambre.
Se considera una persona anorexica si su Índice de Masa Corporal (IMC que se obtiene al dividir el peso en kilos entre la altura al cuadrado) es menor de 17.5. Existe la anorexia del tipo restrictivo, en el cual la persona sólo deja de comer; y la anorexia del tipo compulsivo, en el cual la persona recurre a atracones de alimentos, y en ocasiones a purgas como vómitos autoinducidos, o uso excesivo de laxantes o diuréticos, o ejercicio exagerado.
Consecuencias de la anorexia
La anorexia es un problema grave ya que la persona pierde su calidad de vida, desarrolla diversas enfermedades y en los casos más drásticos, puede llevarla a la muerte. Además, la persona con esta enfermedad se aísla socialmente, se vuelve irritable y desarrolla varios trastornos psicológicos.
